Espelunca.- ¿Habéis oído las medidas que va a tomar el gobierno? Parece que la situación es chunga: congelar las pensiones, bajarle el sueldo a los trabajadores del estado… ¡un partido socialista obrero!
Felisa.- ¿Política? ¡Menudo muermo! ¿No os habéis enterado de que el Atlético de Madrid ha ganado una copa europea?
Madriguero.- ¡No seas inconsciente, Felisa! La verdad, Espelunca, es que son unas medidas muy injustas.
Covadonga.- Pues a mí me parece que es lo que tenía que hacer, pero debió hacerlo antes.
Espe.- ¿Por qué te parecen injustas, Madriguero?
Madriguero.- Resulta que la crisis la provocan los buitres especuladores de los bancos, y los empresarios del pelotazo, que sólo piensan en forrarse a costa de lo que sea, y luego lo pagan los currantes, los viejos y las madres: ¡menudo sistema perfecto del capitalismo!
Espe.- ¿Qué medidas habrías tomado tú?
Madriguero.- Lo primero es que, si no se hubiese permitido a esos buitres dirigir la economía y la sociedad entera según sus intereses sin control, no habría pasado nada de esto. Pero, por si fuera poco, ni siquiera les hacen pagar a ellos la factura. ¿Crees que van a investigar el fraude de los peces gordos, o a cobrarles más impuestos, hasta que devuelvan lo que han sacado de las espaldas de todos? Van a perder los mismos, como siempre.
Cova.- Es muy fácil criticar a los malditos empresarios y banqueros…
Espe.- ¿De quién es la responsabilidad de lo que pasa, según tú, Cova?
Cova.- No digo que no haya empresarios aprovechados, pero no se puede generalizar. Hay capitalismo en otros países, y han superado bien la crisis.
Madriguero.- ¿Entonces quién ha causado esta situación aquí?
Cova.- El gobierno socialista, que no ha querido tomar antes las medidas laborales que ahora no ha tenido más remedio que tomar. Y otras que va a tener que tomar, como hacer más barato el despido y no proteger tanto a los vagos. Son las únicas medidas que funcionan: cada uno debe llegar hasta donde pueda, siempre que se de igualdad de oportunidades a todos.
Madriguero.- ¡Menudo cuento! Primero piden libre mercado y luego, cuando lo hunden, piden que el estado, o sea, todo el mundo, los rescate del ahogo.
Cova.- Pues que les dejen hundirse. Yo sólo te puedo decir que mi padre tiene una empresa, y sabe que, si tiene un trabajador incompetente, no hay manera de hacerle trabajar ni echarle. No digamos si pagamos a alguien por no trabajar, como en el paro, o haga lo que haga, como pasa con los funcionarios. ¿No te parece, Espe?
Espe.- Bueno, el otro día estuvimos hablando del mejor sistema educativo del mundo, en Finlandia, y vimos que es prácticamente todo él público, casi todos los maestros son funcionarios. Así que no puede ser eso. Pero lo que me pregunto es por qué el gobierno toma estas medidas, si no cree en ellas.
Madriguero.- Porque no le queda más remedio, porque se lo imponen los demás gobiernos capitalistas, que están en manos de empresarios y banqueros, o ¿todavía te crees que gobiernan los políticos, representantes de los ciudadanos?
Cova.- No, el gobierno toma esas medidas porque sabe que son las únicas que pueden acabar con el paro. Siempre que hay crisis, se toman esas medidas.
Espe.- Y ¿por qué funcionan esas medidas, si es que funcionan?
Cova.- Muy fácil, porque somos todos egoístas, y si no nos premian o nos castigan, no movemos un dedo. Si no premias el mérito, nadie hace nada.
Madriguero.- Eso es lo que nos venden. Pero ¿te has preguntado alguna vez por qué no quiere uno trabajar? Pues porque el sistema laboral es injusto, y cualquier trabajador lo sabe. Es injusto que algunos tengan cien veces más propiedades y poder que otros.
Cova.- Tienen lo que han ganado.
Madriguero.- ¡Venga ya! ¿Qué iban a ganar, fuera de la sociedad? ¡Y ganan todo eso especulando, traficando con dinero! ¿No te parece, Espe?
Espe.- No sé. Yo lo que veo es que hay países capitalistas (como Finlandia, por ejemplo) donde se pagan muchos impuestos y hay muchas protecciones sociales; y hay países capitalistas con mucha libertad de empresa, como la India o Estados Unidos, que nadie querría para sí mismo (yo al menos). No creo que vayan juntos empresario y responsable, ni funcionario y vago, ni empresario y mafioso o trabajador y angelical.
Cova.- ¿Entonces a qué crees que se debe nuestra situación?
Espe.- Ya sabéis que yo soy muy idealista, y creo que la causa de cómo se comportan las personas es su manera de pensar. Creo que, a no ser que cambiemos nuestro egoísmo torpe, no saldremos de nuestro destino.
Madriguero.- ¡Ideas! Dime de qué vives y te diré las ideas que tienes.
Cova.- ¡Dime las ganas que tienes de trabajar y te diré de qué vives!